Acción compuesta por evoluciones individuales y/o colectivas que se realizan en un breve espacio de tiempo, de manera habitualmente imprevista (a pesar de que se deben establecer y prever las acciones de forma estratégica) cuando el equipo que ataca pierde el balón, que continua estando en juego pero controlado por un jugador adversario.
En este caso trabajaremos lo expuesto en la sub-fase defensiva -1- para evitar el control eficaz del balón por parte del contrario, un ataque rápido o un contraataque, y en el mejor de los casos recuperar el balón.
Si el balón se pierde durante el juego en nuestra zona de inicio, la disposición de los jugadores que no están en la orientación del juego –sub-fase 0- (y la de los que realizan el apoyo de emergencia) deben solucionar el problema evitando el juego rápido y eficaz del contrario (presión intensa, repliegue hacia nuestra portería, falta táctica,...).
Si el balón se pierde en un saque directo de portero o de portería, será lo que esté previsto en la estrategia lo que nos permitirá neutralizar la situación y la posterior recuperación del balón.